*Hay quién recomienda no acariciar al perro para no reforzar o "premiar" el miedo que sienten, eso es totalmente incorrecto. El miedo no se refuerza, pero sí se transmite. Si tú estás preocupado o tienes miedo de que tu perro lo pase mal y en ese momento lo acaricias sin que él te lo pida, entonces sí que estás transmitiendo tu miedo. Si por el contrario tu perro te pide que lo acaricies o que lo abraces, hazlo, pero con mucha calma y tranquilidad. Tu perro debe entender, que ese ruido no te preocupa nada. Actúa siempre con mucha calma y normalidad.
*Es recomendable cerrar las ventanas y bajar las persianas para amortiguar el ruido, poner la tele o música a un volumen un poco alto para minimizar el ruido de los petardos.
*Intenta no dejar sólo en casa o encerrado a tu perro durante esos días o en la noche de San Juan, no hay nada más aterrador para un perro que tiene pánico a los petardos, que dejarlo solo y encerrado en casa.
*No es recomendable darle las típicas pastillas Calmosedan o Calmoneosan ya que no son ansiolíticos y por el contrario tienen un efecto de relajante muscular muy potente. Así, tu perro pierde movilidad y el control de su cuerpo pero sigue oyendo el ruido de los pertados. Entonces tenemos a un perro que está aterrado y que siente que sus patas y su cuerpo no le responden adecuadamente y no puede huír. Hay otras sustancias que sí son ansiolíticas como por ejemplo las benzodiacepinas. Consulta siempre con el veterinario antes de darle cualquier medicación a tu perro. Ten mucho cuidado si tu perro tiene una edad avanzada, problemas de riñón, corazón o cualquier otro problema de salud.
*Si prefieres darle a tu perro algo natural puedes probar con valeriana, pasiflora, avena o melisa. Encontrarás preparados que contienen la mezcla de estas plantas o bien pastillas de una sola de ellas en herbolarios.
*Durante estos días, en el paseo, lleva siempre a tu perro sujeto por la correa. Hay niños que tiran petardos durante el día y pueden asustar a tu perro y podría cruzar una calle o escaparse y salir lastimado. Toma todas las precauciones necesarias e incluso, cambia de recorrido o lleva a tu perro a pasear a una zona dónde no haya peligro de que tiren petardos cerca. Piensa que la reacción de un perro asustado es imprevisible.