Aquí tenemos los métodos de prevención actuales:
- Collares repelentes. El más conocido es el Scalibor. Se debe poner de marzo a octubre y en zonas más cálidas, durante todo el año.
- Pipetas. Hay varias marcas (advantix, frontline combo, etc)
- Leisguard. Se trata de un jarabe que se adminsitra durante 30 días seguidos cada cuatro meses (febrero, junio, octubre). No tiene efectos secundarios y puede darse a cualquier perro de cualquier edad. También sirve como tratamiento para perros ya infectados.
- Vacuna Cani Leish. No es una vacuna que proteja al 100% a los perros, es un método más de prevención pero se debe combinar con el collar y/o las pipetas. Se han dado algunos casos de reacciones alérgicas tanto graves como leves. Existe mucha controversia sobre esta vacuna. Lo mejor es que consultéis con vuestro veterinario y aclaréis todas vuestras dudas.
-Colocad mosquiteras en casa y no dejéis que vuestros perros duerman en el jardín o en la terraza en los meses de mayor actividad del mosquito (de marzo a octubre-noviembre).
-Utilizad enchufes anti-mosquitos en el interior de vuestras casas.
-También podéis utilizar velas, incienso, etc de citronela en el exterior.
-No dejeis platos bajo las macetas llenos de agua o recipientes con agua estancada en el jardín o la terraza. Es un sitio idóneo para que los mosquitos pongan sus huevos.
-Llevar a vuestro compañero cada año al veterinario para que le realice el test de leishmania es muy recomendable. Se suele hacer entre diciembre y febrero, que es cuando ya da un resultado más fiable. Si la leishmania se detecta prezcomente los tratamientos son más baratos y menos agresivos y el pronóstico mucho más favorable.
Afortunadamente, con los tratamientos disponibles hoy en día, nuestro perro tendrá una vida larga y normal.
La mejor defensa contra la leishmaniosis es una buena prevención.
Este artículo sólo pretende informar. Consulta siempre con tu veterinario.